Pequeño jardín de casa adosada.

Misteriosamente, se encuentra en el centro de Valencia.

Un naranjo con alguna naranja. Tres naranjas en el suelo.

El señor pirotécnico puede comenzar la mascletá.

Dos gnomos custodiados por una “estatua griega” de origen alicantino. Unos jóvenes valencianos han pasado por este jardín para terminar sus últimas botellas de alcohol, creando el caos por dónde pasan. Las adorables figuras ya están solas así que pueden cobrar vida.

Van descubriendo secretos los unos de los otros, la escultura “griega” dice ser un gnomo y la SEÑORA alemana, dueña de la casa, es asesinada.

Todos son sospechosos.

Hasta los topos.